Entrevista con Dominga Gutiérrez
de Silencio Blanco

Ana Díaz Barriga

Dominga Gutiérrez es cofundadora, productora, y titiritera de la compañía chilena de teatro de títeres Silencio Blanco. Hablamos el 31 de mayo de 2022 acerca del trabajo de la compañía, su nuevo proyecto, y la importancia de los objectos para la memoria y el medio ambiente. Estos fragmentos de nuestra conversación se enfocan en su conocida producción Pescador y en la importancia de darle una segunda vida a los objetos. El nuevo documental de Silencio Blanco sobre la investigación que realizaron para Pescador está disponible en: https://vimeo.com/640791139

 Pescador de Silencio Blanco. Fotografía de Nathaly Arancibia.

Ana: Antes que nada, me gustaría preguntarte acerca de un aspecto fundamental del uso de materiales de Silencio Blanco porque sé que usan materiales simples: papel, cinta, madera. ¿Qué los llevó a decidir usar estos materiales?

Dominga: Creo que la estética de Silencio Blanco tiene que ver con nuestra filosofía del teatro y de la vida. La idea de darle una segunda vida a las cosas tiene que ver con que hoy en día cuestionamos el que todo sea tan desechable. Antes, uno compraba un refrigerador para toda la vida y hoy en día dura dos años. Entonces, como que estamos en contra de que todo sea tan desechable. No buscamos en algo nuevo o en construir desde cero, si no en dar una segunda vida porque los materiales y las cosas ya están. Nuestro uso de materiales tiene que ver con esa visión y con las temáticas de Silencio Blanco: el rescate de lo que ya existe, como la vida de los pescadores, de los mineros, etc. Se relaciona con ese rescate del cotidiano. No vamos a inventar una historia nueva de ciencia ficción, si no que buscamos lo que está muy cerca de nosotros. Se trata de mirar un poco más de cerca nuestro cotidiano. 

A: Se enfocan mucho en los oficios artesanales que están en proceso de perderse, como los mineros y los pescadores. ¿Podrías decirme más acerca de la relación entre su uso de materiales y su enfoque en estas profesiones?

D: Buscamos rescatar algo que está frente a nuestros ojos pero que muchas veces no nos detenemos a mirar. Vivimos en Chile, un país de mucha costa que está lleno de pescadores, entonces los hemos visto durante toda nuestra vida, pero como que están ahí y no nos cuestionamos qué pasa con su cotidiano. Son obreros que están alrededor nuestro y tiene que ver con eso—con el rescate de lo que tenemos cerca. En general, la gente busca muy lejos. Va a construir en cosas muy lejanas y nosotros tratamos de buscar cosas más cercanas. En ese sentido, este enfoque se relaciona con el medio ambiente; no necesito importar un silicón de algún país distinto. De hecho, la primera marioneta que construyó Santiago la hizo de ramitas de un árbol, no porque quisiera darle una vuelta al tema del medio ambiente, si no que era lo que tenía ahí a la mano.

Pescador de Silencio Blanco. Fotografía de Eduardo Bunster

A: Hablando de Pescador más específicamente, ¿me puedes decir más de la relación que ustedes observaron y querían plasmar entre el pescador y el ambiente?

D: Por un lado, está la presencia del buque constante. Se escucha; es un antagonista que no se ve. Es ese sonido grave que se escucha como que viene a atacar la pesca artesanal. En Chile, la pesca artesanal se ha visto muy amenazada por los grandes buques extranjeros. Entonces, es el rescate de un oficio que está en pelea uno a uno—o sea el pescador en su bote frente al mar, sin esa tecnología gigante. Y nos dimos cuenta de que era muy difícil hablar de ese pescador porque ese pescador ya no existe. Nos inspiramos en las personas que viven en torno al mar, pero no necesariamente en el pescador artesanal que ya fue consumido de cierta manera. Pero los pescadores igual tienen una relación con el medio ambiente que hoy en día está contaminada de lo que el sistema necesita para que ellos puedan generar venta y nosotros queríamos volver un poco al origen.

A: Pero ustedes hicieron trabajo de campo visitando pescadores…

D: Sí, pasamos doce días en las Caletas del Maule en Constitución y observamos a los pescadores. Y nos dimos cuenta de que el pescador artesanal romántico de bote y red que nosotros imaginamos no era tal cual. Desromantizamos un poco el personaje del pescador, pero igual queríamos hablar de su relación con el entorno: cómo es cuando están solos en la mar, la relación que tienen de observar hacia dónde recorre el viento, por dónde se mueven los pájaros. Todo lo que entrega la naturaleza les da informaciones que en general dejamos pasar y en verdad son muy necesarias.

Pescador de Silencio Blanco. Fotografía de Nicolas Calderon.

A: ¿Cómo decidieron qué partes de esa experiencia plasmar en Pescador?

D: La narración se armó a través de imágenes que fueron quedando en nuestra retina y cómo queríamos hacer sentir al público estas imágenes que son inabarcables porque la vida de los pescadores es muy inabarcable. O sea, el mar es inmenso. Entonces la narración se fue armando a través de eso y la constante presencia del buque que viene con la pesca de arrastre y viene a comerse todo. Es la amenaza constante que se escucha en Pescador, y es tan grande que no se puede competir con él. Al final, cuando el pescador suspira y baja la cabeza es como decir “Aquí vamos de nuevo.” Cómo todos los días tiene que salir a pescar uno, dos, diez pescados versus este buque que viene y arrasa con todo el fondo marino y todo lo que existe. Es una lucha que ni siquiera se puede llamar lucha porque es demasiado dispar.

A: ¿Cuál sientes que es el rol que los títeres juegan en invitarnos a reevaluar nuestro rol en el mundo?

D: Yo creo que nos hace percibir la vida desde esta sensación de que todo existe; toda la materia puede tener vida. Por otro lado, la marioneta personifica la magia que existe en el día a día y que no vemos. El hecho de creer en algo que en realidad es un objecto, pero en verdad te está comunicando algo. La marioneta se manifiesta en muchas formas sobrehumanas de entender y percibir el mundo; ilustra muchas fuerzas que se conjugan. Por ejemplo, en una marioneta que es manipulada por tres manipuladores, se conjuga la energía de tres personas. Imagínate eso a gran escala en la naturaleza. Va más allá de si uno cree o no en la magia. Con la marioneta podemos ver magia y en la naturaleza también. 

A: ¿Por qué hacer Pescador con títeres?

D: Creo que el cambio de proporciones nos ayuda a mostrar historias más sencillas y más humanas. Nos permite detenernos en detalles y deconstruirnos. Ver la ficción que te muestra la marioneta te permite verlo desde otra mirada. No es lo mismo que si lo haces actuando. Si fuera un actor real, eso lo vemos todos los días, pero lo que nos permite la marioneta es completamente un cambio de proporciones. Es magia, pero es magia real. Este cambio de proporciones nos permite concentrarnos en detalles que no vemos en la escala humana; desordena el cerebro humano. 

Pescador de Silencio Blanco. Fotografía de Nicolas Calderon.

A: ¿Me puedes explicar más?

D: No es lo mismo, por ejemplo, ver a un actor servirse pan con mantequilla en una mesa, que ver una mesa en miniatura, con todo lo mismo, y una marioneta—que no es humana porque claramente es de papel—hacer exactamente lo mismo, con el mismo gesto, el mismo movimiento, la misma sutileza. Esta es una marioneta que en realidad la están moviendo tres personas. Es completamente distinto. Y si uno quiere centrarse en ese gesto de cómo ese ser se está sirviendo el pan con mantequilla, uno lo ve completamente distinto al verlo en una marioneta. Estamos acostumbrados a vernos entre humanos, entonces ver algo distinto genera un cambio de proporciones que nos mueve el piso y nos hace concentrarnos más. 

A: La impresión que tengo es esta sensación de que el objecto mismo nos conecta, ¿no?

D: Sí.

A: Los trabajos que ustedes hacen conectan mucho con el entorno entonces, ¿es cómo llegar a lo humano a partir del entorno?

D: No es el entorno y el hombre: ¡nosotros somos parte del entorno! Las marionetas son antropomorfas. Todavía no hacemos marionetas de viento o de fuego; eso lo han hecho los cuerpos humanos, transformarse, cambiar la materialidad. O sea, una cosa que es objeto pasa a ser humano, y un cuerpo que es humano pasa a ser mar, espuma, roca en Pescador. 

Pescador de Silencio Blanco. Fotografía de Nicolas Calderon.

A: Cuando ustedes hacen sus espectáculos, ¿cuál es el sueño?

D: El sueño es que la gente se emocione. No queremos cambiar el mundo. Quizás queremos, pero no sé si pretendemos hacerlo con nuestras obras. Viviríamos mucho más frustrados. No creo que a través de la obra Pescador la pesca industrial se va a acabar y vamos a recuperar la pesca artesanal. No tiene que ver con eso. Tiene que ver con rendir homenaje a esos oficios. Sacarlos del museo o de los libros y ponerlos ahí para detenerse en otras cosas que en el museo o en los libros no se detienen.

A: Hablando del documental que hicieron sobre su proceso de creación de Pescador, ¿por qué eligieron documentar su trabajo de campo?

D: Uno trabaja mucho tiempo y muy profundo para llegar a una obra. Y la obra es una cosa, pero para llegar a eso se hizo mucha investigación que igual es interesante mostrar. Así como mostramos el oficio del pescador, también es interesante mostrar nuestro oficio de creadores para que la gente conozca más en profundidad de qué se trata nuestra vida y nuestro oficio. No es solamente pararse en el escenario y actuar. Todo lo complicado que es nuestro oficio, también es interesante mostrarlo.

A: ¿Me puedes hablar más de esa parte de ir a mostrar el trabajo a las comunidades de dónde salió la inspiración?

D: Para mí, es devolverle a la gente lo que es de ellos. Ellos para nosotros fueron inspiración, pero es su historia. Nosotros nos inspiramos en ellos, entonces es devolverles ese regalito. Como que quien te pasó la harina para hacer el queque, darle un pedacito de queque a esa persona. Y también, por un lado más grande e importante, nosotros nos centramos en sectores socialmente más vulnerables y mostrarlos como protagonistas es algo socialmente muy bonito de hacer. Toda la producción que hicimos el viernes, que fue una producción gigante, montaron un escenario maravilloso, se rentaron luces, se le puso plata e intención para mostrárselo a los pescadores y que ellos se vieran ahí como protagonistas de la historia. 

A: Sólo tienen uno de cada uno de sus títeres y, creo que lo mencionan en el documental, ¿qué pasa cuando se rompen los títeres?

Pescador de Silencio Blanco. Fotografía de Nathaly Arancibia.

D: Se arreglan porque también cada marioneta se va llenando de todo, como empapando de los actores que la han manipulado, de la historia que tiene. Las marionetas antiguas se van llenando de historia, entonces sería muy raro decir, “oye, está muy vieja, cambiémosla.” Se va llenando la materialidad de historia de funciones en el cuerpo, así como una actriz vieja o un actor viejo. Entonces siempre se van arreglando. Si es necesario volver a forrarlas en papel de diario, se vuelven a forrar, pero no se hacen de nuevo. 

A: ¡Muchas gracias!